Acaba la huelga de hambre por la custodia compartida
Los gaditanos abandonan la protesta después de 26 días, en los que han perdido hasta doce kilos y han reunido 7.000 firmas
La fecha la habían fijado hacía tiempo: el mismo día de las elecciones autonómicas, dejarían su protesta. Y así lo han hecho, en la mañana del domingo 25 de marzo, José Antonio Caparrós y su pareja, Carmen Castañeda, retiraron las pancartas que habían colgado a las puertas de la Audiencia y abandonaron la huelga de hambre que comenzaron veintiséis días antes para reclamar un cambio legislativo a favor de la custodia compartida. La protesta la comenzaron tres, pero la han terminado dos, ya que el tercer compañero abandonó la huelga el décimo día. «José Martín tenía problemas de salud, y estaba más bajo de moral que nosotros», explicaba ayer José Antonio Caparrós. «Además, le salió un trabajo en esos días», aclaraba.
Después de casi un mes sin comer, sentados junto al Palacio de Justicia, José Antonio y Carmen se han tostado por el sol y han perdido al menos 12 kilos. «En principio, teníamos previsto terminar ahora, pero la salud ha pesado mucho. Hacía dos o tres semanas que los médicos nos dijeron que teníamos que abandonar la huelga», reconoce José Antonio.
La reforma legislativa que reclamaban no se ha producido, pero insisten en que la protesta ha sido un éxito. «Sabíamos que no iba a ser fácil y que la actuación no iba a tener un resultado inmediato», explicaba ayer Caparrós: «Nos agradó que Rosa Díez (UPyD) se acercara a vernos cuando vino a Cádiz; nos garantizaron que después de las elecciones andaluzas presentarán una propuesta para favorecer la custodia compartida». Además, José Antonio recordaba que en estos días han recogido 7.000 firmas recogidas y han asesorado a «muchos padres, madres y abuelas», algunos de los cuales se han adherido a la Federación por la Defensa de la Igualdad Efectiva que preside Caparrós. «Hemos hecho nuestro trabajo -asegura-. Ahora le damos el relevo a nuestros compañeros de Vigo, Tenerife y Granada», donde también hay padres en huelga de hambre.
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